La perspectiva en Las meninas. Velázquez

Velázquez. Las Meninas. 1656. Museo del Prado. Madrid. El Barroco intenta aumentar la sensación de realidad cuando contemplamos un cuadro y nos invita entrar en un espacio que a nuestro cerebro se le presenta verosímil con el objetivo de hacernos participar de la obra de arte. Velázquez en Las Meninas utiliza como Leonardo una perspectiva central localizando el punto de fuga bajo el brazo del personaje del fondo, pero  se apoya en otras formas de conseguir esa distancia: las figuras más alejadas se presentan con menor nitidez, las caras nos las presenta más borrosas porque las vemos peor por la distancia y le añade una perspectiva de color, cuanto más lejos está una figura, los colores son más tenues. Con todo ello consigue que el aire circule entre los personajes. Velázquez intenta que nos sintamos los reyes, nos invita a pasar al interior del cuadro y a circular entre los personajes. Aprovechamos para hacer un par de preguntas sobre este cuadro: ¿cuál es la escena que pinta el Velázquez en el cuadro?, ¿dónde están situados los reyes que se ven reflejados en el espejo de la pared del fondo?
Al pulsar Play comienza una animación en la que podemos apreciar varios pasos: (1) Ocultamos la parte inferior y superior del cuadro y nos quedammos con la zona intermedia en la que se encuentran los personajes sin el resto del edificio. Vemos que casi todos ellos se encuentran a una distancia parecida respecto de nosotros. (2) Localizamos el punto de fuga dibujando algunas de las líneas de fuga: las que limitan los cuadros que hay entre las ventanas de la pared de la derecha, el techo y las dos lámparas de la parte superior izquierda.También construimos los rectángulos de los cuadros de la pared derecha, que en la representación serán trapecios con dos lados verticales y los otros dos sobre las líneas de fuga del apartado anterior. (3) Con algunas de las líneas de fuga representamos un rectángulo que podemos modificar de tamaño como si fuera un gran cristal rectangular que desplazaríamos perpendicularmente al suelo adelante y atrás en la estancia. A la izquierda se ha colocado un deslizador que nos permite manipular la distancia a la que colocamos el cristal, con ello simulamos en la imagen lo que sería una  traslación en la realidad y que aquí se convierte en una homotecia con centro en el punto de fuga.