Movimiento rotatorio subjetivo

Esta actividad pertenece al libro de GeoGebra La percepción del movimiento, que se complementa con los libros La percepción de la forma y La percepción del tamaño.
Si disponemos dos anillos concéntricos como el de la figura, o similares, podemos obtener un curioso efecto de movimiento subjetivo: al acercar o alejar la cabeza mientras miramos el centro de los círculos, estos parecen rotar. Es decir, nuestro movimiento de traslación, perpendicular a la imagen, se transforma perceptivamente en un movimiento de rotación en cada uno de los círculos.
La causa de esta ilusión puede ser inferida a partir de esta figura, que muestra la variación del tamaño relativo que vemos al alejarnos o acercarnos a un objeto (en la figura, un círculo). 
En el caso de los anillos de rombos, cuando nos alejamos la figura de cada anillo se contrae, lo que provoca que cada rombo se mueva radialmente hacia dentro. Este movimiento puramente radial hacia dentro hace que el borde exterior de cada rombo pase a ocupar la posición que tenía un instante antes el borde interior. Pero como estos dos bordes no estaban a la misma altura, en esta sustitución se produce un desplazamiento perpendicular al radio del círculo, es decir, tangencial. Este desplazamiento es interpretado ópticamente como un movimiento circular de cada rombo.