Relación entre la presión y la profundidad

Ejemplo de función creciente. Esta gráfica se corresponde con la que aparece en la página 134 de tu libro de texto.

Se trata de una función CRECIENTE en todo su dominio ya que, a medida que aumenta la profundidad, también aumenta la presión en el interior del agua.

Cuando nos sumergimos en el agua, la presión que ejerce ésta sobre cualquier objeto sumergido en su interior (presión hidrostática) aumenta de manera uniforme y depende de la profundidad a la que nos encontremos. En la superficie, estamos sometidos únicamente a la presión atmosférica, que tiene un valor de una atmósfera (1 atm). Pero, a medida que nos vamos sumergiendo, la presión aumenta una atmósfera, aproximadamente, por cada 10 m que profundizamos. Como puedes apreciar en la gráfica, se trata de una función CRECIENTE en todo su dominio ya que, a medida que aumenta la profundidad, también aumenta la presión en el interior del agua.
Usa el punto azul para  desplazarte por la gráfica y ver cómo varía la presión en función de la profundidad. Observa que se trata de una FUNCIÓN LINEAL, ya que la gráfica es una línea recta, siempre creciente.